martes, 2 de agosto de 2011

Debido a la nefasta política del Ministerio del Interior, éste hace un año firmó un acuerdo para que los tradicionales tricornios de la Guardia Civil pasaran a fabricarse en Shangai. Desde los años veinte se elaboraban de manera artesanal en un taller de Coslada y Sevilla, pero la necesidad de ahorrar costes acabó con esta tradición.

Hoy en día es fácil ver por las calles de toda China a multitud de personas luciendo un tricornio como símbolo de elegancia y poder.

Desde la Guardia Civil, dicho contrato no sentó nada bien. Primero debido a que se traslada al extanjero, en este caso el mercado chino, productos que dan trabajo a la población española y segundo porque nuestro tradicional tricornio, símbolo y emblema de un Cuerpo serio, para convertirlo una vez más por parte de Interior, en símbolo de mofa y befa.

Puede parecer absurdo dar importancia al traslado de la producción del tricornio de España a China, sin embargo para mi es bastante serio, ya que la competitividad que de por si ofrece el mercado chino, se ve aún más acuciada si las propias instituciones españolas favorecen esos mercados, en detrimento de los españoles.

Ya son varios los fabricantes chinos que ofrecen imitaciones del tricornio oficial. La diferencia, un tricornio hecho en España ronda los treinta y cuatro euros; el chino, no más de cuatro. Además que los tricornios chinos no están hechos de corcho, sino de conglomerado. Ahora, la cabeza no transpira y, al no tener el agujero ovalado –es redondo- se tuercen o se caen.

Es inconcebible que gracias a la política del Ministerio del Interior, la cual era sumamente nefasta para la Guardia Civil, haya sucumbido al poder de la industria textil china, el dragón oriental que absorbe poco a poco todos los mercados mundiales, en detrimento del mercado Patrio.

Aunque quizá, gracias a Vd., sr. Rubalcaba, quizá a partir de ahora podamos ver a personajes como Donnie Yen, Jackie Chan, Jackie Wu, Tony Jaa, Sammo Hung, vestidos de guardia civil y dando saltos por la gran pantalla con nuestro tradicional tricornio.

Menos mal Sr. rubalcaba que nuestro incómodo, pero emblemático símbolo, prácticamente ha dejado de ser operativo, para ser usado en Ministerios, Embajadas y actos protocolarios,aunque quizá y gracias a esto, es posible que se planteen a partir de ahora cambiar el año chino, por el año del tericornio.

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