miércoles, 4 de noviembre de 2009

¿ACOSO LABORAL EN LA GUARDIA CIVIL?


El acoso laboral en el trabajo, es un fenómeno cada vez más extendido y sobre el que se ha dicho demasiado, pero sobre el que pocas sentencias se han ganado.

Sobre este gravísimo problema laboral, todos los expertos hablan sobre la necesidad cada vez más acuciada de poner fin al mismo, si bien son pocos los Órganos de Intervención que realmente velan porqué no se produzca. Sin embargo, la realidad es que las Instituciones son las encargadas de velar por los trabajadores y por su salud y actualmente hay muy poca preocupación al respecto de este tema, sobre todo en Órganos Políticos y de la Administración, como en el caso al que me voy a referir, el ámbito de la Guardia Civil.

Como no soy experto en la materia clínica, no voy a entrar en estos detalles, si bien como trabajador de la Guardia Civil, si voy a intentar narrar brevemente la grave problemática existente en el Cuerpo a este respecto.

Simplemente citaré la definición que hizo el magistrado Ramón Giménez la Hoz y que lo definía como “la presión laboral tendenciosa encaminada a la auto-eliminación de la víctima”.

Es obvio que para que se produzca un acoso moral o psicológico, es necesario que se den las circunstancias adecuadas y un entorno que sea factible a la complicidad del hecho causante. Que mejor medio que un entorno en el que el acoso se disfraza en incumplimiento de órdenes, aunque estas sean en muchos casos discutibles desde el punto de vista legal.

La jerarquización de la Institución y la falta de mecanismos de defensa laboral de este tipo, facilita que cualquier problema personal derivado de un enfrentamiento con cualquier superior jerárquico, puede ser fácilmente camuflado dentro del entorno de la insubordinación y la protección institucional del rango la concha perfecta de protección para el acosador.


Según el Diccionario de la Real Academia Española define el acoso
moral o psicológico, como “la práctica ejercida en las relaciones personales, especialmente en el ámbito laboral,consistente en un trato vejatorio y descalificador hacia una persona, con el fin de desestabilizarla psíquicamente” y un entorno sin prácticamente medios de protección para el trabajador como la Guardia Civil, es el medio ideal para efectuar este tipo de conductas. De hecho en la Guardia Civil se produce un elevadísimo índice de suicidios y aunque en muchos casos pueden ser provocados por problemas personales, la grave problemática por la que atraviesa el Cuerpo, no favorece en absoluto a la mejora de este tipo de conductas, sino que lo único que hace es agravar el problema. El tipo de servicios en algunos casos, donde hay guardias civiles que se encuentran solos prestando servicio en pésimas condiciones, las penosas condiciones retributivas, la presión psicológica ejercida por el propio servicio, la vulnerabilidad que siente un guardia civil de cualquier escala frente a sus superiores jerárquicos y la falta de protección por parte de la Institución para que estos hechos no se produzcan; teniendo como factor añadido un arma en la mano, pueden facilitar  que los acosos laborales en la guardia civil acaben en muchos casos en bajas psicológicas de larga duración, y en el peor de los casos en el suicidio o el asesinato por la presión ejercida por el acosador.

Por desgracia en el seno del Cuerpo prevalece estigmatizar a aquellos que defienden sus derechos, que a buscar una solución real al problema, encontrándonos un elevadísimo número de guardias civiles de diferentes escalas de mando, de baja psicológica laboral, donde tras pasar por numerosas angustias administrativas y en algunos casos de agravado acoso frente a la baja laboral, acaban retirados del Cuerpo con edades muy jóvenes.

Es vergonzoso que esto suceda en una Institución, por no poner los medios adecuados. Los cuales no son ni mucho menos, como las últimas medidas propuestas por el Gobierno y aprobados en sus disposiciones adicionales a los Presupuestos Generales del Estado de 2008, más conocidas como “el pensionazo”, y que lo único que consiste es en reducir las pensión hasta en un 25% para los Guardias Civiles que acaben retirados por bajas psicológicas o por enfermedades muy graves, como medida para reducir las bajas en el Cuerpo.

La única medida real para reducir este tipo de bajas psicológicas, es tratar seriamente la raíz del problema y atajarlo con soluciones serias y definitivas como crear órganos independientes a la Dirección General del Cuerpo, que contrasten si realmente se puede estar efectuando una presión psicológica sobre sus componentes y atajar esos problemas duramente, sancionando a quien haya que sancionar, sin tener que mirar antes su rango. Se debe crear inmediatamente la figura del mediador de conflictos, el cual a su vez debe ser también independiente del organismo y con capacidad ejecutiva a la hora de tomar decisiones. En definitiva, se deben crear medidas correctoras, pero no coercitivas que lo único que hacen es castigar a un profesional que ha sido impunemente acosado y señalado por la Institución.

5 comentarios:

Miguel Angel Lezcano dijo...

Tomaré buena nota de sus datos, por si me preguntan. Un saludo y gracias por la aportación. Son muchos los guardias civiles que sufren acoso laboral

Anónimo dijo...

Mi pareja también trabaja en la Guardia Civil, y por ello, conozco bastante de cerca la temática que planteas. Realmente existen muchas carencias en esta Institución. Es mucho lo que se le exige al profesional y poco lo que se le da. Es un intercambio en el que sale perdiendo. Realmente es difícil que las cosas cambien, al menos, a corto o medio plazo, puesto que es una institución militar en la que el rango prevalece por encima de otros aspectos.

Y como se ha comentado mucho últimamente, la remuneración económica no se corresponde con las exigencias del puesto.

Es una lucha ardua y difícil, aunque espero que algún día las cosas cambien aunque sea solo un poco y nos den algo de esperanza.

Saludos.

Anónimo dijo...

pues yo estoy de baja spicologica
soy manpasju

el acoso sigue y no lo impide nadie

Miguel Angel Lezcano dijo...

Pues por desgracia hay que seguir luchando por ello y por tus derechos, aunque te cueste que al final te larguen, como mepasó a mi. Como suelo decir: "la dignidad debe estar siempre por encima delmiedo"

Anónimo dijo...

El ACOSO existe y mucho , y el que lo ve también es cómplice y CULPABLE ,en el momento que no declara,hablo desde la experiencia