lunes, 13 de julio de 2009

TEXTO ABIERTO


Estimados compañeros:


Como sabéis temporalmente me he apartado de los foros, bolg, etc, debido a los problemas personales que ya os comunique en anterior entrada, sin embargo parece que algunos se niegan a olvidar a una persona, lo que me obliga a pensar que sólo viven de esto y que no tienen más mundo social que las asociaciones.


Noticias recientes que me han llegado, me informan de un intento de descrédito personal hacia mi, que incluso atentaría contra mi honor, e incluso me llegan noticias de que alguno se ha atrevido a lanzar amenazas contra mi persona, llegando a mantener actitudes dignas de la mafia. Al parecer dichas amenazas van encaminadas a que mantenga un mutismo absoluto, e incluso a coartar el más constitucional de los derechos "la libertad de expresión". Desconozco de donde viene este intento de descrédito.


Algunos incluso se atreven a divagar sobre mi persona, o incluso otros especulan sobre si voy a montar otra asociación, o voy a hacer esto o aquello.


Me he permitido entrar (aún no estando en condiciones de ello), en los foros y sitios de opinión, para comprobar incluso como algunos, se atrevían a poner comunicados incluso en nombre de la Unión de Guardias Civiles y sus dirigentes, sin que hasta la fecha tenga constancia de la veracidad del mismo, ni que se halla hecho oficial, por lo que no daré crédito a dicho comunicado.


Para todos ellos decirles lo siguiente:


He intentado apartarme todo lo posible del asociacionismo, sin embargo algunos parece que no consiguen olvidarme. No se si por miedo, o por enemistad personal, pero los intentos de descrédito hacia mi persona, lo único que pueden causar son consecuencias muy negativas para una asociación que tanto me costó levantar, junto al resto de los que estuvieron a mi lado.


El proyecto de la Unión de Guardias Civiles inicial, por el que tanto aposté, fué una de las ideas más bonitas por las que he luchado. A excepción de mi etapa en el SUGC (para los que no lo sepan Sindicato Unificado de la Guardia Civil, ya que hay muchos que ahora van de luchadores y no tienen ni pajolera idea de como se luchó en esa etapa y en que condiciones). Sin duda, abandoné mi familia (tengo mujer y tres hijas), mi tiempo, mi trabajo (mi horario era de 07'30 a 14'30 de lunes a viernes y vistiendo de paisano), mis amigos y todo mi entorno social y personal, para entregarme en cuerpo y alma a la Unión de Guardias Civiles.


He sufrido acoso laboral y vulneración de mis derechos laborales (lo cual tengo denunciado y en curso judicial), por mi actividad en el asociacionismo. He sufrido un expediente por la manifestación del día 18 junto a C.N.Policía, el cual sigue su curso y me piden seis meses de empleo y sueldo (vuelvo a recordar que tengo mujer y tres hijas).


En mi etapa en el SUGC era el secretario del Pais Vasco en la etapa 90-91, junto a grandes luchadores como Patxi, Bargados, José león y un extenso etc, de los cuales alguno ni siquiera habrá oido hablar.


Por estas circunstancias creo que me gané el derecho a mi retiro del mundo de las asociaciones si bien parece que algunos insisten mediante manipulaciones, engaños, campañas de descrédito e incluso por informaciones recientes que me han llegado; amenazas, que no me dejen la tranquilidad suficiente como para abandonar este mundo del asociacionismo y llegar a lo que yo llamo "el digno reposo del guerrero".


Pues bien, mis dicrepancias con la actual junta directiva nacional de la Unión de Guardias Civiles ha sido obvia desde el 2008. El proyecto por el que tanto aposté entendí que no se estaba realizando a mi entender de forma correcta. En ningún momento como algunos han aseverado, he recibido apoyo personal a raiz de mi expediente por la manifestación del día 18, por parte de los dirigentes de la junta directiva nacional (a excepción de dos) y sobre esta circunstancia no voy a permitir que se diga lo contrario.


Todas estas circunstancias hicieron que se produjera una situación de enfrentamiento personal, que me llevaron a entender que no seguía mereciendo a pena seguir dejando mi vida, mi familia, mi tiempo y mis circunstancias personales en estas condiciones.


Así mismo quiero señalar que solicité a la Unión de Guardias Civiles tanto cultural como profesional, que antes de dimitir se comprobara y analizara toda mi gestión en la misma a través de su Secretaría General y secretaría respectivamente, mi gestión en la Unión de Guardias Civiles Cultural y Profesional. Circunstancia que se realizó expediéndome documento de la misma posteriormente en el que se valora que mi gestión ha sido ejemplar.


Por todas estas circunstancias me veo en la obligación de informar, que cualquier afirmación, rumor, amenaza, o cualquier circunstancia del tipo que sea que atente contra mi honor, será puesto inmediatamente a disposición judicial, así como todas las circunstancias añadidas que conlleven la defensa del mismo.


Siento tener que volver a ponerme frente al ordenador y máxime para estas cosas, pero llega un momento que uno se cansa de tantas metiras, calumnias, acoso y derribo, etc, con el único fin de desacreditar a alguien quizá por miedo a que se vaya a otra asociación o quizá por enemistades personales a lo largo de este mundillo de las asociaciones lleven a todo esto.


Aunque no quisiera irme sin antes dejar un pequeño consejo:


Hasta que no aprendamos que el mundo de las asociaciones chiringuiteras, de los feudos, de los personalismos asociativos, deben dejar paso a un mundo asociativo profesional y profesionalizado, que nos lleve a un camino similar al de los Cuerpos Policiales, no llegaremos nunca a conseguir ni derechos, ni mejoras en nuestras condiciones de vida profesional.


Por mi parte lo veré desde la lejanía, si alguna vez llega ese momento.


Un saludo a todos